Músculo "quemado", sobre-fatigado ó sobre-entrenado, son sinonimos.
Un músculo se "quema", cuando se ha entrenado de forma intensa por
varios días, sin proporcionarle el tiempo suficiente de recuperación entre
una sesión de entrenamiento y otra.
Los efectos de este sobre-entrenamiento son la disminución en la
capacidad de crecimiento y fuerza muscular, por lo que el músculo ya no
progresa en volumen ni en fuerza.
¿Que debemos hacer para evitar el sobre-entrenamiento muscular?
Es fácil, simplemente debes permitirle a cada músculo en particular, un
tiempo adecuado de recuperación.
En el caso de los ejercicios de musculación, cada músculo no deberá
ejercitarse en un tiempo menor de 36-48 horas.
Recuerda que durante el período de descanso, es cuando las fibras
musculares se reconstruyen. Y es en este momento, que se va
adquiriendo mayor fuerza y volumen.
La premisa de que un músculo crece durante el descanso, es cierta.
Las siguientes recomendaciones, te evitarán una sobre-fatiga muscular:
1) No trabajes nuevamente un músculo, en un tiempo menor de 36-48
horas.
2) No deberás realizar actividades intensas, durante el período de descanso (como practicar algún
otro deporte).
3) Cada cierto tiempo de entrenamiento continuo, es conveniente un período de descanso mayor. Por
ejemplo, si llevas un promedio de 3 meses practicando ejercicios de musculación con una frecuencia de
4 a 5 veces por semana, sería adecuado un descanso de una semana completa.
Incluso regresarás al
gimnasio con mayor fuerza.
Sigue estos sencillos consejos y lograrás mayores progresos en fuerza y volumen muscular.